Las presas son un elemento arquitectónico muy necesario que construimos en empresas de cimentación en Zaragoza para encauzar caudales de agua, canalizarla para regar o consumir, evitar inundaciones, producir energía mecánica y, mediante las centrales hidroeléctricas, convertirla en energía eléctrica.

La mayoría de las presas en los países más desarrollados son de hormigón, porque es duradero y muy estable. Aunque hay algunas de ladrillo o de piedra (sillares), en España el grueso de las presas es de hormigón.

Nuestra empresa, Estructuras Civiles Antonio Míguez, no se limita a hormigonar, sino que coloca también las estructuras metálicas: el encofrado, las cimbras, encofran las galerías y montan la ferralla.

Hay presas que sirven como diques de retención, también las llamamos filtrantes. Se trata de que pase el agua pero dejando atrás materiales sólidos que no nos interesan o que queremos acumular del otro lado y que pueden ser muy pequeños (arena fina, por ejemplo) o grandes rocas.

Otras presas tienen la finalidad de subir el nivel del agua para que se pueda conducir (abajo quedan los sedimentos para que el agua llegue en mayor cantidad sin obstruirse). Aquí no importa retener el agua, así que no necesitamos construcciones muy altas.

Otras presas funcionan sobre todo como depósito, esta función es muy importante en nuestro país y en las empresas de cimentación en Zaragoza, debido a las habituales sequías. La estructura de estas presas tiene que ser especialmente resistente porque se acumulan enormes cantidades de agua, que ejercen mucha presión.

Te seguimos contando más cosas sobre presas en próximas entradas. ¡Tus dudas son bienvenidas!